10 de octubre de 2013
Como se indicó en el Informe Especial No. 21, del 30 de agosto de 2013, la actividad del volcán Tungurahua mostraba un claro descenso en todos los parámetros monitoreados. Sin embargo, desde la mañana del domingo 6 de octubre se registró un cambio de comportamiento y un nuevo incremento en la actividad sísmica y superficial.
Esta cambio de comportamiento se caracteriza por un incremento en el número de eventos asociados a la movilización de fluidos al interior del volcán, tipo largo período (LP), señales de tremor de emisión y explosiones. Esta actividad se encuentra asociada con el aumento de la actividad superficial, caracterizada por la presencia de columnas de emisiones con ceniza, la generación de varias explosiones de tamaño pequeño y moderado, la expulsión de bloques y fuentes de material incandescentes (actividad tipo estromboliana) que posteriormente descienden por los flancos del volcán.
Brillo al interior del cráter y actividad estromboliana. Fuente: OVT/IGEPN
Asociado a este incremento de actividad se han recibido reportes de caída de ceniza en poblaciones localizadas al occidente y sur-occidente del volcán, como El Manzano, Bilbao, Chacauco, Choglontus y Mocha.
Además, durante este nuevo episodio de actividad se estableció que los valores del flujo de SO2 cambiaron de un mínimo de 87 toneladas por día el 3 de octubre a más de 1000 toneladas por día el 7 y 8 de octubre.
Por otra parte, la red de deformación indica una deflación en la parte superior del cono, que posiblemente estaría relacionada con el paso de material magmático hacia el cráter del volcán.
De manera permanente el Instituto Geofísico y el Observatorio del Volcán Tungurahua mantiene el monitoreo y vigilancia del volcán, y comunicará a autoridades y comunidad en general el desarrollo y características del mismo.
GR/GV/VL/AS/SV/PM/LT
Instituro Geofísico
Escuela Politécnica Nacional
9:45 (tiempo local)