18 de septiembre de 2013
En la primera semana de septiembre, personal del Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional (IGEPN), gracias a la gestión realizada por la Secretaria de Gestión de Riesgos (SGR) y el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, obtuvo un helicóptero para realizar tareas de mantenimiento, reparación e instalación de equipos en el sistema de monitoreo del volcán Reventador. Todos los trabajos programados fueron realizados con éxito y el sistema de monitoreo funciona sin inconvenientes.
Vista del flanco sur-oriental del volcán. Se observa el depósito del flujo piroclástico que habría descendido en la mañana del jueves 5 de septiembre. (Foto: S. Vallejo, IG-EPN)
Durante los días que el personal se mantuvo en la zona, del miércoles 4 al sábado 7 de septiembre, se reportó que la actividad del volcán se caracterizó por la constante generación de eventos explosivos que produjeron columnas de emisión con variables contenidos de ceniza de una altura promedio de 500 metros sobre el nivel del cráter y rodamiento de bloques por los flancos del volcán. Sin embargo, en la mañana del día jueves 6 de septiembre se pudo observar una columna de emisión con ceniza que alcanzó los 3 km sobre el nivel del cráter y el descenso de flujos piroclásticos por el flanco sureste del volcán una distancia aproximada de 1.5 km desde el borde del cráter. Durante el día viernes 7 de septiembre se continuó observando el descenso de pequeños flujos piroclásticos que afectaron la zona superior del cono.
Vista del flanco sur-oriental del volcán, se observa la importante acumulación de material piroclástico en el sector del cráter, las fumarolas alrededor del cráter y las trazas de pequeños flujos piroclásticos asociados a la actividad explosiva. (Foto: S. Vallejo, IG-EPN)
Además de los fenómenos mencionados se identificó el descenso de un nuevo flujo de lava por el flanco suroriental y que hasta el momento de la observación (mañana del día sábado 8 de septiembre) había recorrido aproximadamente un kilómetro desde el borde del cráter. Con respecto al cráter se pudo observar que existe gran acumulación de material piroclástico dispuesto en este sector y en los flancos superiores, lo que provoca la continua caída y rodamiento de piroclastos hacia las partes bajas. Además, se observó una intensa actividad fumarólica en las paredes externas del cráter y es evidente que la altura alcanzada por el material acumulado en el cráter supera la cumbre occidental del volcán (3562 m) dejada por la explosión generada en el año 2002.
Al momento la actividad sísmica se mantiene caracterizada por la generación de eventos relacionados con la movilización de fluidos al interior del volcán y la presencia permanente de columnas de emisión con variables contenidos de ceniza.
SV/FV/PR/LT
Instituto Geofísico
Escuela Politécnica Nacional
17:00 (tiempo local)